Dormir es un momento solemne, en que el alma se desliga del cuerpo, reabsorbe su esencia-luz y puede migrar hacia rincones divinos donde el Espíritu lleva a cabo excursiones, estudios y reencuentros. ¡Qué felicidad, encontrarte con almas queridas! Sí, es posible. Tú eres un ser divino.
Es sencillo, el cuerpo está allí, en la cama, mientras tú, alma, te deslizas hacia otra frecuencia espiritual. Y tú, entonces, vuelas hacia el infinito sorbiendo los aires angélicos del mundo esencial.
Este momento mágico es una excepcional oportunidad con que te obsequia el Universo para reponerte de las luchas del día a día.
Además, “hay una sustancia, contenida en las neuronas, que representa el alimento psíquico absorbido por el cuerpo espiritual en el laboratorio de la vida cósmica, a través de la respiración, durante el reposo físico. Ella restaura las células fatigadas e insustituibles”, afirma André Luiz, a través de Chico Xavier.
Hay una interacción cuerpo físico, campo vibracional (constituido de varios cuerpos, mental, energético, emocional, causal) y Espíritu.
Cuando alimentas tu cuerpo hay todo un movimiento celular, dirigido por la mente, para absorber del alimento la luz/energía que cada uno contiene y esta luz/energía es distribuida por todo el sistema orgánico. Según investigadores, ese proceso es responsable por el 20% del sostenimiento de tu cuerpo. ¿Te ha admirado?
Lo que te da el otro 80% de sostenibilidad es la respiración, responsable por la absorción del oxígeno y del prana (energía cósmica universal).
Como se ve, la costumbre de dormir es fundamental para la salud de tu cerebro. Y te restituye la oportunidad de estar en la posesión integral de tu espiritualidad.
En mis experiencias psíquicas de apoyo y señalización de caminos, utilizo el sueño como recurso expresivo.
Algunos biógrafos indican que Albert Einstein en sus pesquisas se servía del soñar como búsqueda de soluciones para las intrincadas investigaciones que realizaba sobre la Ley de la Relatividad. Él estudiaba exhaustivamente todas las vertientes y después se iba a descansar, afirmando que al despertar tendría respuestas. ¡Y éstas venían!
Un científico descubrió la configuración de un elemento químico, al soñar con una culebra que mordía su propia cola. Despertó, alineó los átomos conforme al dibujo soñado y tuvo la solución para su experimentación.
El acto de soñar puede convertirse en una actitud extraordinaria, tanto para la salud de cuerpo, como he dicho, como para la reasignación de tu vida. Prueba a prepararte para el sueño, a tener plena consciencia de esa liberación temporal de las ataduras sensoriales que vas a hacer, y decreta con coraje e inteligencia que esta noche no vas simplemente a dormir, por el contrario, harás una zambullida en el Universo.
Y en esa aventura, vas a atraer para tu vida informaciones y energías de superior calidad, aparte de promover encuentros importantes para experiencias reconciliatorias y rescates expresivos de pérdidas profundas que hayas causado a lo largo de tu existencia.
Indico algunos procedimientos que pueden ayudar. La geometría sagrada es un proceso desarrollado por Maestros y Curanderos Chamánicos. Es frecuente que los indios y los seres espirituales formen círculos de oración, para rituales de sanación.
Las formas geométricas alteran y concentran las energías en el cuerpo físico y en el espiritual. Imagínate entrando en un cuadrado de luz o formado por seres iluminados; esa figura tiene relación con el chakra raíz (final de la columna). Tranquiliza y aumenta la fuerza vital.
Si quieres hacer en el sueño un proceso de acoplamiento para estar más conectado, atento y perceptivo, imagínate dentro de un triángulo; y si el objetivo es ser más creativo o regenerar la mente, el cuerpo y las relaciones, la figura es un círculo.
Anuncia al Universo tu intención, a través de la oración, un mantra o simplemente un comando: Yo me amo, me perdono todo y a todos, doy gracias y bendigo mi cuerpo y mi alma.
Un procedimiento que siempre hay que llevar a cabo es la respiración, si posible abdominal, imaginando que se está sorbiendo el oxígeno y la luz divina, y soltando gas carbónico y todo aquello que no sirve para tu cuerpo y alma.
Si encuentras dificultades, entra en sintonía y solicita a tu Ángel de la Guarda, y también cuenta conmigo.
En la Ronda de la Compasión, pongo a disposición apoyo incondicional para la realización de todo y cualquier proceso del Bien.
Sueña, lo necesitas y puedes. En cada día, tienes como mínimo 6 horas para salir de las ataduras del cuerpo y llevar a cabo la aventura de una excursión por el Universo.
por WebMaster
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Publicado dia 9/2/2014 9:53:24 AM em STUM WORLD
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